Chen, Chu-li

CHU-LI CHEN, LOS CARACTERES MORALES Y LA PRODUCCIÓN POR LOTES

El año que pasé en Brighton estudiando ilustración fue uno de los más felices de mi vida. Era mi segundo año en el Reino Unido, mi inglés estaba mejorando y ya entendía el noventa por ciento de lo que decía mi profesor, George Hardie; podía, incluso, traducirle cosas a mi compañera. Batch production («producción por lotes»), sin embargo, fue algo que no entendí, a pesar de mirarlo en el diccionario.

Ese era, precisamente, uno de los ejercicios propuestos por George. Yo sabía que quería hacer libros, y como había ido reuniendo algunas ideas sobre tipos humanos y diferencias culturales, no tardé en llegar a la siguiente conclusión: «¡Muy bien! ¿Y por qué no hago unos libros sobre estos caracteres?». Supongo que en ese momento estaba experimentando un choque cultural bastante grande, y de ahí mi interés por los diferentes comportamientos humanos. Mi «producción por lotes» dio como resultado cinco libros diferentes desarrollados en forma de flipbooks, en lugar de cinco copias de un mismo libro. El día de revisión, George me dijo que no estaba seguro de que mis libros fueran una «producción por lotes», pero que, en cualquier caso, le parecían fascinantes. (Lo cierto es que, después de todo este tiempo, aún no sé si hice bien o mal la tarea).

Me gustaba estudiar en Brighton. Allí nadie me decía: esto está bien y esto está mal. Los profesores no nos decían lo que teníamos que hacer, sino que nos animaban a exponer nuestras propias ideas, lo que suponía una gran diferencia con respecto a la educación que había recibido en Taiwán. El Señor Pusilánime, sin ir más lejos, fue inspirado por otro de los estudiantes taiwaneses de la escuela: quería ser invisible y que el profesor no lo viera, para evitar que le preguntaran, ante el miedo de dar una respuesta equivocada.

Aunque hace mucho que he dejado de ser una estudiante, sigo aprendiendo, y cada día agradezco todo lo vivido en esa época. El tiempo que pasé en Europa me ha enseñado la importancia de la comunicación, y lo maravilloso que es poder expresar nuestras ideas y pensamientos.

Chu-li Chen


Chu-li Chen nació en Taichung (Taiwán). Estudió arte en Taipéi y amplió sus estudios en Reino Unido y España. Ha vivido en Granada, una ciudad que le encanta, donde conoció a la familia Granados. Le gusta fotografiar azulejos, tapas de alcantarilla y nubes con formas raras. Ha viajado por muchos lugares, incluso por el desierto. Colecciona mapas. En 2013 publicó un libro, ¡Mucho gusto, España!, que refleja su entusiasmo por este país. Aunque parece que lo hace todo bien (¡hasta las paellas!), también tiene algunos defectos, pero este no es el libro para contarlos.