Libro de milagros de san Vicente Ferrer

¿Qué sentido tiene hoy un libro de milagros? Quizá sirva para recordarnos lo frágiles que somos y lo complicado que resulta habitar un mundo de peligros que se van renovando a diario. Con sus testimonios, los protagonistas de las historias que aquí se cuentan, sobrevivientes a todo tipo de calamidades, nos dicen que vivir es un milagro. Eso debería reconfortarnos. Y luego, claro, está san Vicente Ferrer…

¿Qué es lo que sabemos de este santo? A pesar de ser muy popular en Valencia, ciudad de la que es patrono, y donde se celebra una fiesta en su honor, muy poco se sabe de lo que el predicador hizo o escribió. Reconocemos, eso sí, su figura; sobre todo caracterizado como ángel del Apocalipsis, con el dedo índice apuntando hacia el cielo.

Existen libros de historia escritos por especialistas a los que los lectores interesados pueden acudir para aprender; en los últimos tiempos, nos consta, se han publicado investigaciones hechas con rigor sobre diferentes aspectos de la vida y la obra del santo que pueden ayudar a despejar todas las dudas. Este libro, sin embargo, se sitúa en un lugar distinto. Por su carácter alegre, más que aclarar, es posible que siembre nuevas dudas. Tal como lo concebimos, debería ser una mirilla que nos permita asomarnos a la Edad Media, la época en la que circularon estas historias, un mundo que no está tan alejado de nosotros como pensamos y que es necesario visitar si queremos llegar a comprender el momento en el que estamos.