Sempere, Lorenzo G.ª
(Elche, 1861-1922)
Nació en la villa de Elche —hoy ciudad y patrimonio de la humanidad por sus palmerales—, calle del Pont, 11, el día 17 de febrero de 1861, siendo sus padres los ilicitanos Lorenzo García y Abad, jornalero, y Gertrudis Sempere y Maciá; fue bautizado en la iglesia parroquial de El Salvador, de la población. Realizó los primeros estudios en la tierra natal, a la vez que trabajó, siendo un niño, en un taller de carpintería-ebanistería.
De vocación religiosa, ingresó en el Seminario Conciliar de San Miguel, en Orihuela, pasando poco después al convento de Santo Domingo, de Ocaña (Toledo), en el que tomó hábito —el 8 de diciembre de 1878— y profesó un año después.
Antes de terminar los estudios de Teología, fue enviado —1885—, como misionero, a tierras de Filipinas, archipiélago en el que permaneció catorce años; durante esa época tomó parte activa en la guerrilla al estallar la guerra con los Estados Unidos de América. Destinado inicialmente a la provincia de La Laguna, en la isla de Luzón, pasó poco tiempo después a Manila como profesor en el Colegio de San Juan de Letrán; tras obtener, más tarde, el doctorado en Filosofía y Letras así como en Derecho, por la Universidad manilense de Santo Tomás, fue vicerrector de aquel colegio y catedrático de Derecho de aquella universidad.
De regreso a España en 1899, inició su apostolado en la ciudad de Valencia, siendo elegido por su orden rector del Colegio de Cuevas de Vera, pasando después como prior al convento de Cádiz.
Tras volver a la ya restaurada antigua provincia dominicana de Aragón, fue destinado al convento de Valencia, ciudad en la que, por nombramiento —1917— del padre provincial, desempeñó el cargo de capellán de la casa natalicia de san Vicente Ferrer —Pouet de Sant Vicent— dedicándose, «… siguiendo las huellas de sus predecesores, al aumento del culto divino y a hermosear la Santa Capilla, tan querida y visitada por los piadosos valencianos»; asimismo fue capellán del Ayuntamiento valentino.
Como escritor colaboró con numerosos artículos, en parte bajo seudónimo —«Mirtili»—, en Revista Católica de Filipinas y en El Comercio, de Manila, así como en La Época, de Madrid, y Alma Andaluza, de Cádiz; publicó también algunas obras de carácter social, jurídico, religioso, biográfico y bibliográfico, y, siguiendo su afición al arte de Talía, de teatro —prosa y verso—; asimismo cultivó la poesía. Fue un notable orador sagrado de sólida formación doctrinal y estilo brillante. Falleció en la capital del Turia, calle la Gloria, 6, a los sesenta y un años de edad, como consecuencia de asistolia, el día 28 de abril de 1922; recibió sepultura en el Cementerio General de la ciudad.
José Pastor Navarro
Diccionario biográfico de personajes alicantinos